SpaceX ha alcanzado un nuevo logro en su esfuerzo por explorar el espacio. La empresa espacial de Elon Musk ha realizado con éxito el despegue de la prueba Starship Flight 4 el día 6 de junio, la cual evalúa las etapas combinadas de Starship y Super Heavy. Estas etapas juntas forman el cohete más grande y potente del mundo.
Aproximadamente tres minutos después del lanzamiento desde las instalaciones de SpaceX en Boca Chica, en el sur de Texas, el propulsor Super Heavy se separó de la nave y, por primera vez, realizó un amerizaje suave y controlado en el Golfo de México.
Durante casi una hora, la nave Starship realizó un vuelo orbital seguro alrededor de la Tierra, alcanzando una altitud de 160 kilómetros y una velocidad superior a los 26.000 kilómetros por hora.
Al momento del reingreso, la nave comenzó a reducir su velocidad. Unas 18.000 losetas cerámicas en el escudo térmico protegieron a Starship de las altas temperaturas de reentrada en la atmósfera, cercanas a los 2.000 grados Celsius.
Finalmente, Starship logró encender sus motores sobre el océano Índico y ahora descansa en el agua, aunque algunas partes de la nave se desintegraron durante el reingreso. “¡Amerizaje confirmado! ¡Felicitaciones a todo el equipo de SpaceX por una emocionante cuarta prueba de vuelo de Starship!”, publicaron en X desde la empresa de Musk.
En su vuelo 3, Starship logró despegar, separarse de la primera etapa y realizar su recorrido previsto de casi una órbita alrededor del planeta, alcanzando (al igual que ahora) una altitud de aproximadamente 160 kilómetros y una velocidad superior a los 26.000 kilómetros por hora. Después, tras más de una hora de vuelo, Starship pudo abrir y cerrar las compuertas de la nave y transferir combustible entre tanques, tal como estaba planeado. Sin embargo, al momento de reingresar a la atmósfera terrestre, la comunicación se interrumpió y, momentos después, los controladores de la misión confirmaron que habían perdido contacto con Starship durante su descenso a más de 25.000 kilómetros por hora.
Starship Flight Test 4 es el cuarto vuelo del megacohete que SpaceX está desarrollando y que, una vez completado, será el vehículo más potente jamás construido en la historia.
Este desarrollo representa el futuro del negocio de lanzamiento de satélites y astronautas de SpaceX. La NASA tiene previsto utilizarlo en los próximos años para llevar a los primeros astronautas a la luna desde 1972 y, a más largo plazo, para poner al primer humano en Marte.